"Haz lo necesario para lograr tu más ardiente deseo, y acabarás lográndolo" decía el abuelo Beethoven, y esa idea intentamos inculcaros cada día en clase. Es por ello, que cuando vayáis a los servicios, si os paráis un poco, veréis en la pared una frase lapidaria "Hago lo que debo, aunque me cueste", porque es así, nada se consigue si no presto antes un esfuerzo.
Vivimos en una época donde queremos que todo nos lo den hecho, pero debéis, debemos saber, que nada se regala en esta vida, y que la mejor manera de lograr un porvenir, en vuestro caso, y mejorar como docentes, en el nuestro, es pensar siempre en el esfuerzo, porque como dijo el amigo Tito Livio, "cualquier esfuerzo resulta ligero con el hábito"
PD: Si alguno cree que esto no es así, ¿os habéis fijado en la cantidad de horas que entrena un futbolista o una corredora? o ¿creéis que para dar clase aquí en este colegio, nos recogieron en la calle?
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